3. Procedimiento para llamar y entregar a los ángeles a los seres espirituales negativos que acompañen a los atacantes mágicos del grupo

 

Se comienza preguntándole al Padre: “Señor, ¿hago la oración para entes acompañantes de atacantes, ¿sí o no?”.

 

Si la respuesta es “sí”, se hace esta oración:

 

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, a cada uno de los seres espirituales que acompañáis a los individuos que me han atacado mágicamente ahora, escuchadme todos, estéis donde estéis y situaos ante mí.

 

Yo os entrego en manos de estos ángeles, para que os encaminen al lugar que el Señor os haya destinado.

 

Amén.

 

Luego, se pregunta: “Señor, ¿paro o sigo?”.

 

Se repetirá la oración hasta que en mensaje mental recibido sea “para”.

 

​La gestualidad para esta oración es la misma que en el caso del punto 10.11. Captura y entrega a los ángeles de entes que están fuera del cuerpo y del áurea del paciente del libro 2: se hacen las tres cruces en el aire mientras se citan las 3 personas de la Trinidad. Luego, los pases de impulso se efectúan mientras se recita “Yo os entrego en manos de estos ángeles, para que os encaminen al lugar que el Señor os haya destinado”.

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3.1. Protección ante ataques mágicos durante el sueño

 

En un escenario de ataques mágicos grupales recurrentes, recomiendo muy vivamente hacer cada noche sin falta y justo antes de dormir la oración nocturna 1 (punto 8.4.2. del libro 1), pues nada impide que un ataque llegue en algún horario intempestivo de la noche. 

 

Eso nos va a proteger al menos ante buena parte de ellos, aunque si nos llega alguno mientras dormimos y produce unos síntomas lo suficientemente fuertes como para despertarnos, la recomendación es aplicarse el proceso de liberación completo cuanto antes.

 

En este caso, considere que ese síntoma juega a su favor, aunque no tenga nada de agradable, pues simplemente estará actuando como un sistema de alarma eficaz.

 

Se libera usted en unos minutos y, listo, a dormir tranquilo otra vez.

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